Mi día empieza allá sobre las 5 de la mañana cuando el sonido estruendoso de vete a saber qué sonaba como para tirar la casa abajo!!! Me da la impresión de que son 2 ranas sumidas en una discusión de pq una despierta a la otra a esas horas ya que cada vez el sonido de cada una de ellas va en aumento, y es que era casi imposible dormir nada… por el sonido daba la impresión de que las ranas eran del tamaño de algún tipo de perro, pastor belga, san bernardo o algo parecido… y encima por el ruido parecía que estuvieran dentro de la habitación, pero claro es lo que tiene venir a la naturaleza, y aunque parezca molesto no lo estoy para nada… los que me conocen saben que me encanta este tipo de cosas y que aunque me despierte pronto y me den ganas de matar a alguien en realidad soy muy manso jejeje
El desayuno como de costumbre es en el floating boat en el rio, y de ahí esperar un poquito hasta que salga nuestro bote dirección Kuala Tembling que es donde cogemos la guagua hasta Jerantut y luego hasta Kuala Lumpur, donde para mi sorpresa nos deja en el mismo Chinatown, y mi guesthouse casualmente se encuentra ahí :p
El trayecto en bote, ahora mismo escribiendo estas palabras, es de lo mas tranquilo, musiquita, durmiendo aunque hace algo de frio que está lloviendo y compartiendo cosas y habladurías chapurreadas en ingles con los compañeros de aventura que he tenido en Taman Negara, una pareja inglesa, una pareja greco-inglesa, una china y yo (españóooo) 😉
Como íbamos a favor de la corriente, en horita y poco nos hemos puesto en Kuala Tembeling desde Kuala Tahan, ha sido más rápido de lo esperado, sobre la marcha nos recogió un micro y nos llevó a Jerantut, donde comeríamos y donde otra guagua nos llevaría a Kuala Lumpur… Total unas 4 horas y pico de trayecto desde las 9 de la mañana, por lo que sobre las 3-4 de la tarde estaríamos por ahí.
La parte de Kuala Lumpur la escribo en el siguiente capitulo para no mezclar muchas cosas, ya que Taman Negara había acabado ya, con un buen sabor de boca.
Hasta KL!!!